El 10 de junio, la Policía Nacional de Colombia (PNC) impidió el paso a venezolanos que intentaban llegar a la ciudad de Cúcuta por vías irregulares, conocidas como “trochas”.
Según refirió EFE, más de 500 policías llevaron a cabo un operativo para desmantelar estas vías alternas e impedir el paso ilegal de migrantes hacia su nación.
El coronel José Luis Palomino de la PNC, aclaró a medios de comunicación que las personas que traten de cruzar por estas rutas, serán llevadas con las autoridades de Migración Colombia para luego ser deportados a Venezuela.
La Policía Nacional de Colombia consideró que algunos venezolanos todavía utilizan estas vías por las inmensas colas para ingresar a ese país. Adicional a ello, Palomino explicó que algunos no poseen los documentos reglamentarios.
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Según Migración Colombia, tan solo los días 8 y 9 de junio más de 70.000 venezolanos pasaron por el paso fronterizo. La mayoría de estos ciudadanos, fueron al país vecino en busca de alimentos y asistencia médica.
El viernes 7 de junio, el mandatario Nicolás Maduro ordenó la reapertura de los pasos migratorios entre ambos países. Sin embargo, la ruta solo es para peatones, debido a que permanecen los contenedores en medio de los puentes.
A mediados de febrero de 2019, Maduro ordenó el cierre de este paso fronterizo luego de que Juan Guaidó, presidente de la Asamblea Nacional de Venezuela, ordenara el ingreso de la ayuda humanitaria.
Crisis migratoria en la mira
Ante la crisis en Venezuela, ACNUR envió a su embajadora, Angelina Jolie, para observar la entrega de ayuda humanitaria a venezolanos migrantes.
Jolie mantuvo una reunión con el presidente de Colombia, Iván Duque, en la que hablaron sobre la medidas a tomar respecto a la ayuda a venezolanos.
“El presidente (Duque) y yo conversamos sobre el riesgo de que más de 20.000 niños venezolanos se conviertan en apátridas y su compromiso de apoyar a los niños”, aseguró la embajadora.
Según cifras de la ONU, más de cuatro millones de venezolanos han abandonado el país en medio de las crisis económica y humanitaria. De ellos, un millón salió en los últimos siete meses.
