La vicepresidenta de Colombia, Marta Lucía Ramírez, reveló a un medio digital la noche del 26 de junio que ese país no tiene previsto por el momento solicitar visa a los migrantes venezolanos como sí lo hizo Chile y Perú para frenar el flujo de personas a esas naciones.
Indicó que para Colombia ha sido “difícil mantener la posibilidad ilimitada e indefinida de recibir la migración venezolana”, ya que en la actualidad los costos son “monumentales” por tener acogidas a casi 1.5 millones de personas que llegan en condiciones “precarias y muy dolorosas”.
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En ese sentido, destacó que el plan que tiene previsto el presidente Iván Duque es fomentar la inversión extranjera en el país para generar empresas y así poder brindarle la posibilidad a los venezolanos que lleguen a esa nación poder tener mejores ingresos y una buena calidad de vida. Para eso, están estableciendo “programas de impacto” en zonas como en la frontera y darle beneficios fiscales a los que deseen invertir.
Por eso, insistió en que la comunidad internacional debe presionar aún más para propiciar la salida de Nicolás Maduro del poder y así generar un cambio de políticas en Venezuela, ya que “si hiciéramos hipótesis pesimista que se va a extender la crisis venezolana dos, tres y hasta cinco años más, Colombia no puede seguir sola”.
Manifestó que el Gobierno colombiano mantiene comunicación constante con el presidente de la Asamblea Nacional, Juan Guaidó, quien se juramentó el 23 de enero como presidente encargado de Venezuela. De él, la vicepresidenta Ramírez dijo que era un “hombre íntegro” que trabaja por su país y que se esfuerza por escuchar a todos los sectores tanto nacionales como internacionales.
Sin embargo, sugirió que debe incluir voces como la de María Corina Machado y Antonio Ledezma “que tienen legitimidad” y sentarse “todos juntos” para buscar soluciones y tomar las decisiones más convenientes, ya que “la unidad de ellos es la claridad fundamental para los miembros de la comunidad internacional que los están apoyando”.
