El aislamiento social no es un pase VIP para sumergirse en el abandono, todo lo contrario, es un momento oportuno para dedicarse tiempo, consentirse, arreglarse en cuarentena y seguir maquillándose.
Puede que hayas visto el confinamiento como una excusa para relajarte un poco, darle un descanso al cabello de la plancha y dejar que el rostro respire de tantos productos cosméticos. Sin embargo, algunos expertos aconsejan seguir con las dinámicas de belleza cotidianas.
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¿Arreglarse en cuarentena?
La revista People en Español entrevistó a la psicóloga Anixua Hernández Viña para abordar si realmente tiene sentido seguir arreglándose en cuarentena.
Para la especialista estar arreglada trae diversos beneficios. “En estos días de cuarentena es importante mantener aquellas rutinas que nos hacían sentir bien antes de esta. Esas actitudes contribuyen a segregar endorfinas, químicos naturales que nos ayudan a experimentar sensaciones placenteras de felicidad”, comenta Hernández.
Por otro lado, la experta en psicología también destaca el hecho de usar este tiempo libre para mimarse, aprender nuevas técnicas de maquillaje, ponerse mascarillas faciales, aplicarse tratamientos capilares o refrescar el look. “Puedes aprovechar este tiempo para jugar y experimentar en las cosas que te gustan hacer”, resaltó.
Aunque la idea de estar todo el día en pijama sea tentadora, para la profesional en psicología y terapeuta de pareja el hecho de asociar el arreglarse con salir de casa puede hacer un vínculo favorable en la persona. Lo que logra con los días una sensación más agradable.
“Una de las cosas que recomendamos nosotros los psicólogos, para salir de la depresión, es mantener rutinas que te hagan sentir bien”, dijo la psicóloga. Un dato interesante para las personas que se han visto afectadas emocionalmente por el confinamiento.
¿Maquillarse para estar en casa?
Estar todo el día dentro del hogar no significa que el contacto con las personas no exista. Son muchos los que trabajan en casa y tienen reuniones por videollamadas o hacen videoconferencias con amigos y familiares para poder verse y conversar un rato.
Al hacerlo y mostrarles una buena imagen puede provocar en la otra persona una respuesta positiva.
“Es agradable ver como las personas que nos quieren nos dan un feedback positivo de nuestra imagen y de nuestro estado de ánimo. Gracias a las neuronas espejo podemos contagiar de felicidad a la otra persona y, al mismo tiempo, contagiarnos a nosotros, se convierte en una rueda de bienestar”. explicó la especialista en psicología.
