Los astronautas de la NASA Bob Behnken (R) y Doug Hurley (L) salen del Edificio de Operaciones y Comprobaciones en su camino hacia el cohete SpaceX Falcon 9 con la nave espacial Crew Dragon. Foto: AFP
La compañía Space X y la NASA tienen todo listo para el lanzamiento de su histórico primer vuelo espacial tripulado con dos astronautas a la Estación Espacial Internacional; aunque continúa la incertidumbre sobre el comportamiento del clima.
El lanzamiento del cohete Falcon 9 con la cápsula Crew Dragon de SpaceX está programado para las 15H22 (19H22 GMT) desde el Centro Espacial Kennedy en Florida. Y se espera la asistencia del presidente Donald Trump.
A continuación algunos datos y curiosidades que debe saber sobre el esperado lanzamiento.
Tras cumplir una estricta cuarentena de dos semanas, Bob Behnken y Doug Hurley tripularán la cápsula Crew Dragon, que será lanzada por un cohete Falcon 9 de SpaceX; la empresa fundada en 2002 por el visionario Elon Musk.
Creador de los automóviles eléctricos Tesla, Musk hizo una gran fortuna con PayPal y, obsesionado con Marte, no dudó en lanzarse a la conquista espacial.
SpaceX es una empresa estadounidense privada que ofrece servicios de lanzamientos comerciales y públicos en sus cohetes Falcon 9 y Falcon Heavy, fundada por el empresario Elon Musk en el año 2002.
Sin lugar a dudas, Musk es un visionario espacial, pues ha estado implicado en una variedad de empresas que lo han llevado al éxito, y ahora es el motor principal detrás de la creación del SpaceX.
La compañía de Elon Musk, SpaceX es la primera empresa privada en enviar astronautas al espacio, por lo que el empresario y la NASA han asegurado que esto es solo el principio.
Así mismo, esta es la primera misión tripulada de SpaceX desde que fue fundada hace 18 años, lo que significa que es una misión histórica de este tipo para la compañía.
SpaceX entró en la historia al convertirse en la primera compañía privada en acoplar una cápsula con provisiones a la ISS en 2012, dos años más tarde, la NASA ordenó avanzar hacia el envió de astronautas, adaptando la cápsula Dragon para el transporte de pasajeros.
Así, colaboró con el sueño original de Musk: “habíamos puesto ventanas en la versión de carga del Dragon”, recordó el lunes el alemán Hans Koenigsmann, vicepresidente de SpaceX.
“Fuimos fundados con la idea del vuelo espacial humano”, agregó emocionado.
El destino de la cápsula de SpaceX, es la Estación Espacial Internacional (ISS), que orbita a 400 kilómetros sobre el nivel del mar a 27.000 kilómetros por hora.
Para Estados Unidos, el éxito de esta misión será motivo de orgullo nacional; pues desde el último vuelo de un transbordador espacial en 2011 recurrió a los cohetes rusos para viajar al espacio, no pudiendo depender de sí mismo.
la pandemia de COVID-19 y el confinamiento impuesto para evitar su avance no implicaron un freno al lanzamiento.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, asistirá al ansiado despegue, siendo el tercer mandatario en funciones del país en observar la salida de un vuelo tripulado; después de Richard Nixon y Bill Clinton.
“Toda América tendrá la oportunidad de ver a nuestro país hacer algo increíble nuevamente”; dijo este martes el administrador de la NASA, Jim Bridenstine.
La agencia espacial resucitó un logo apodado “el gusano”, utilizado en la década de 1970, que con sus líneas rojas adornará el cohete, en un guiño a la nostalgia de la potencia y la carrera por conquistar el espacio.
El programa, en el que la NASA ha invertido más de 3.000 millones de dólares, lleva un retraso de tres años. Boeing está construyendo por separado la cápsula Starliner, con un retraso aún mayor.
Después de un exitoso vuelo de prueba no tripulado el año pasado, una cápsula Crew Dragon explotó en durante una prueba en tierra de los propulsores. El desarrollo de los cuatro grandes paracaídas de la cápsula para el retorno también experimentó algunos contratiempos.
Pero después de miles de revisiones, la NASA cree estar lista para amarrar a dos de sus astronautas en la parte superior de un cohete de 500 toneladas lleno de combustible, que ahora es el SpaceX Crew Dragon.
“Nunca nos sentimos cómodos, porque es ahí cuando uno deja de hacerse preguntas”, dijo Kathy Lueders, la jefa del programa comercial de vuelos tripulados de la NASA. “Vamos a estar alertas hasta que Bob y Doug regresen a casa”, agregó.
El clima sigue siendo la única variable incontrolable. Pero “la tendencia es buena”, señaló Bridenstine, pese a la lluvia que lo obligó a dar su conferencia de prensa bajo techo y no delante del gran reloj de cuenta regresiva.
La decisión de aplazar el lanzamiento puede tomarse hasta 45 minutos previo al despegue, programado para las 16H33 (20H33 GMT). Las próximas potenciales ventanas de salida son el sábado y el domingo.
Una vez en órbita, la cápsula de Doug Hurley y Bob Behnken demorará 19 horas para acoplarse a la estación. Los astronautas podrían quedarse allí hasta principios de agosto.
El viaje de retorno será como el de las cápsulas de Apolo: caerán en el océano, en este caso el Atlántico, frente a la costa de Florida.
Si la misión es exitosa, comenzarán vuelos tripulados regulares. Para fines de agosto está previsto que tres estadounidenses y un japonés viajen a la ISS. En próximas misiones se invitará a socios europeos y canadienses.
Los rusos, que construyeron la ISS en conjunto con los estadounidenses, acordaron continuar con su antigua asociación espacial, que “realmente está por encima de la geopolítica terrestre”, según Bridenstine.
Los astronautas de la NASA, Bob Behnken y Doug Hurley viajarán este 27 de mayo al espacio y fueron seleccionados como astronautas en el año 2000: cada uno ha volado al espacio dos veces en transbordador.
Según la NASA, son dos de los astronautas más experimentados del equipo, los dos son pilotos de prueba lo cual es algo esencial para dirigir esta nueva nave espacial SpaceX, Crew Dragon.
Doug Hurley ya viajó a la Estación Espacial Internacional en el 2011. Ahora, los dos astronautas permanecerán en el (EEI) entre seis y dieciséis semanas, donde participarán en pruebas científicas como técnicas.
Los astronautas Bob Behnken y Doug Hurley probarán el sistema de control ambiental de la nave espacial en la que llegaron al espacio, también conocida como Crew Dragon, además, revisarán los monitores, los controles y los propulsores para maniobrar.
Así mismo, monitorearán el sistema autónomo de acoplamiento durante la aproximación a la estación espacial, después, cuando estén en el puesto remoto de la órbita, continuarán realizando más pruebas al Crew Dragon.
Además, se relacionarán con otros astronautas que se encuentren allí en estos momentos.
Así, este es el último paso tanto para la NASA como para SpaceX para empezar a realizar las misiones de larga duración, pues las compañías esperan llegar a la Luna para el 2024 y a Marte en el 2030.
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