Aumentan las tensiones entre EE.UU. e Irán por el ataque a una refinería en Arabia Saudita

El presidente de EE.UU., Donald Trump, ordenó aumentar las sanciones a Irán y prometió que actuará contra ese país, después de que el Gobierno iraní advirtiera de una respuesta frente a cualquier agresión de Washington, en medio de los recientes ataques a la petrolera saudí Aramco.

Las tensiones entre EE.UU. e Irán viene aumentando en los últimos días luego de que se responsabilizara a los iraníes de los ataques contra varias refinerías de petróleo de Arabia Saudí.

“Acabo de instruir al secretario de Tesoro de que incremente sustancialmente las sanciones contra Irán. Si tenemos que hacer algo lo haremos sin dudar. Hay muchas opciones: está la opción definitiva que sería la guerra con Irán, pero también hay otras opciones”, indicó Trump, quien nombró a su nuevo asesor de seguridad nacional, Robert O’Brien.

El mandatario estadounidense ya había impuesto una amplia gama de sanciones económicas a Irán después de retirar a Estados Unidos del acuerdo nuclear que Teherán firmó con otras potencias mundiales en 2015.

A pesar de incrementar la presión, Trump ha asegurado que prefiere no ir a la guerra con Irán, un conflicto que quiere evitar a toda costa, aunque ha advertido de que EE.UU. está “mejor preparado”.

En las últimas semanas, desde la Casa Blanca se había sugerido que podría darse una reunión entre Trump y el presidente iraní, Hasán, Rohaní a finales de este mes, durante la Asamblea General de la ONU en Nueva York. Sin embargo, Trump dijo que prefiere no reunirse con Rohaní, tras los ataques del pasado sábado.

Una carta entregada en la embajada de Suiza en Teherán, encargada de los intereses estadounidenses en el país persa al no existir relaciones diplomáticas con EE.UU., precisó que el alcance de la respuesta “no se limitará al origen de la amenaza”.

La reacción de Irán será “aplastante y completa”, según apuntó el secretario del Consejo Supremo de Seguridad Nacional iraní, Ali Shamjaní, quien aseguró que Irán está “preparado para sorprender a los agresores”.

La amenaza de Teherán coincide con la visita del secretario de Estado estadounidense, Mike Pompeo, a Arabia Saudí para coordinar una respuesta a los citados ataques, de los que Washington responsabilizó a Irán, quien por su parte ha negado su autoría.

De hecho, las autoridades de Arabia Saudí aseguraron que el ataque a la petrolera saudí Aramco fue “incuestionablemente patrocinado” por Irán.

El portavoz de la coalición militar liderada por Arabia Saudí, Turki al Malki, indicó que los ataques del pasado sábado contra las instalaciones petrolíferas de Aramco fueron efectuados con 18 drones y 7 misiles de crucero iraníes.

En ese sentido, el presidente de EE.UU. Donald Trump ha evitado apoyar ese análisis saudí y ha mantenido una posición de “supuestos” sobre la responsabilidad de Irán en los ataques.

Asamblea de la ONU

La próxima semana se realizará en New York la edición anual de la Asamblea de las Organización de las Naciones Unidas (ONU) en donde la tensión entre EE.UU. e Irán será uno de los temas claves que estarán sobre la mesa

“Este es el momento de calmar tensiones y no hay ningún sitio donde eso sea más importante que en el Golfo Pérsico. Los ataques al petróleo saudí suponen una escalada dramática que debe detenerse”, explicó el secretario general de la ONU, António Guterres.

El secretario ha señalado que expertos de la ONU van a investigar estos ataques, los cuales fueron reivindicados por los rebeldes hutíes de Yemen.

Sin embargo, Estados Unidos ya ha señalado a Irán como el responsable de estos hechos y los dos países llegarán a la Asamblea enfrentados en un peligroso choque.

Precisamente, el presidente Trump anunció que va a aumentar las sanciones contra Irán y aseguró que no “dudará” en actuar contra el país persa si es necesario.

De otro lado, el Gobierno iraní amenazó con una respuesta “aplastante e inmediata” a cualquier agresión por parte de EE.UU.

Las relaciones entre ambos países han venido deteriorándose luego de que Trump llegara al poder y decidiera que EE.UU. saliera del acuerdo internacional nuclear para frenar el programa nuclear iraní.