Julio fue el mes más caluroso jamás registrado en la historia

El mes de julio del 2021 fue catalogado como el mes más caluroso jamás registrado en la historia, según lo dio a conocer el Centro Nacional de Información Ambiental (NOAA).

“En este caso, el primer lugar es el peor lugar para estar” comentó Rick Spinrad, administrador de la NOAA. Y es que aunque generalmente julio suele ser el mes más caluroso en todo el año, el pasado mes del año 2021 se superó a sí mismo.

Este resultado es perturbador y da otra alerta más para el ya marcado cambio climático que estamos viviendo a nivel global.

Julio, el más caluroso

El récord de temperatura para el mes de julio se había establecido en el año 2016, pero para el 2021 fue 0,02°F (0,01°C) más alto que el de hace cinco años y este solo había sido igualado en el año 2019 y 2020.

Con estos datos entregador por el Centro Nacional, es muy probable que el 2021 se ubique entre los 10 años más cálidos registrados en el mundo.

Según el informe Asia tuvo el mes de julio más calurosos registrado superando el récord anterior establecido en 2010.

Para Europa este julio fue el segundo más caluroso registrado empatando con el del 2010 y detrás de julio de 2018.

Por su parte para América, África y Oceanía este mes de julio de 2021 tuvieron un julio entre los 10 más calurosos reportados.

Calor extremo y cambio climático

Según los comentarios realizados por Spinrad, el calor extremo detallado en estos informes son un reflejo de los cambios a largo plazo descritos en un importante informe publicado por el Panel Intergubernamental sobre el cambio climático, cuyas siglas en inglés son IPCC.

“Científicos de todo el mundo entregaron la evaluación más actualizada de las formas en que el clima está cambiando”…

“En un informe del IPCC se concluye que la influencia humana está, de manera inequívoca, causando el cambio climático, y confirma que los impactos son generalizados y se intensifican rápidamente”, comentó Spinrad.

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¿Qué queda por hacer?

Según los expertos no hay más alternativa que reducir las emisiones de gas invernadero para generar un positivo impacto frente a las consecuencias del cambio climático.

Si bien es cierto se necesitan de políticas y reglamentaciones que ayuden a que grandes empresas implementen este tipo de acciones, también está en nuestras manos contribuir a pequeña escala:

• Reducir el uso de automóviles privados.
• Elegir una movilidad sostenible como la bicicleta.
• Consumir energía renovable.
• Tener conciencia de consumo y aplicar las tres R: reducir, reutilizar y reciclar.
• Adaptarse a una dieta con baja huella de carbono
• Plantar árboles

Estas acciones las podemos aplicar en nuestro día a día y estaremos contribuyendo a reducir esas devastadoras consecuencias del cambio climático.