España comienza a arrepentirse por el “Delcygate”

En España no han cesado las críticas de la oposición y la polémica en los medios de comunicación a raíz del encuentro misterioso entre la vicepresidenta de Nicolás Maduro, Delcy Rodríguez, y el ministro de Fomentos, José Ábalos en el aeropuerto de Barajas- Madrid.

La ministra de Asuntos Exteriores, Arancha González Laya, comentó este viernes que si el Gobierno “hubiera conocido con más antelación la llegada Rodríguez, a la capital española, hubiera prohibido el aterrizaje del avión en el que viajaba”.

En una entrevista a la emisora de radio Cadena SER, la canciller reveló que se enteraron de la visita de la funcionaria venezolana cuatro horas antes de su aterrizaje.

“Habríamos tomado la decisión de prohibir el aterrizaje porque el gobierno español cumple con las sanciones impuestas dentro de la Unión Europea”.

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González Laya reconoció que tuvieron que gestionar una situación que no fue “cómoda” y han expresado su disconformidad a la administración de Nicolás Maduro.

“Hubiéramos preferido no tener que gestionarla”, concluyó.

Rodríguez está sancionada por la Unión Europea por su participación en la violación de derechos humanos en Venezuela y el socavamiento de la democracia.

La medida contempla la prohibición de la entrada al espacio Schengen.

Respecto a la situación que vive el político opositor venezolano Leopoldo López, “alojado” en la embajada de España en Caracas por razones de protección de su integridad, afirmó que seguirá allí “mientras sea necesario”.

La canciller insistió en la necesidad de un acuerdo político que lleve a unas elecciones “libres transparentes y democráticas” y que dé respuesta al problema humanitario que sufren los venezolanos.