Pizza grande con ingredientes variados. Foto: Freepik
Nada mejor que estar en casa preparando recetas para comer delicioso, saca tus habilidades en la cocina y realiza esta pizza al horno para que consientas tu paladar y el de tu familia.
¿A quién no le gusta la pizza? esta comida es sumamente popular y si el problema está en la sazón de los establecimientos comerciales, entonces puedes probar esta versión casera de pizza al horno.
Esta preparación es saludable y muy fácil de hacer. Puedes prepararla para almorzar algo diferente y sabroso o simplemente dejarla para la noche y cerrar el día con broche de oro.
La particularidad de esta receta es que contiene calabaza y boniato, ingredientes poco comunes en la creación de este plato italiano. Sin embargo, esta versión casera posee un sabor delicioso porque combina ingredientes sanos que al unirse producen una comida diferente y sabrosa.
Por otro lado, no es necesario que salgas de casa si no cuentas con los alimentos exactos de la receta. Puedes buscar ingredientes que tengas en la cocina y, de igual forma, te den una pizza al horno deliciosa.
Si eres amante de los sabores dulces y quieres hacer una pizza al horno con ese sabor, puedes añadirle a la masa una cucharada de stevia y agregarle topping como fresas, almendras, banana, nueces, coco, chocolate o lo que desees.
Esta preparación dulce es perfecta para merendar algo distinto. Además, puedes usar esta idea para celebrar un cumpleaños, aniversario o graduación creando una pizza al horno especial y agregando los topping favoritos de esa persona.
Anímate a hacer esta receta y sal de la rutina. Cambia tu sándwich de todos los días y dale la oportunidad a esta pizza al horno casera.
Inicia colocando a hervir la calabaza y el boniato. Acto seguido, licúa con huevo, sal y aceite los alimentos anteriores. Añade poco a poco la harina y mezcla todo en un recipiente hasta obtener una masa homogénea (que no se pegue en las manos). Si crees que le falta harina, agrega un poco hasta que sea una mezcal manejable.
Sobre una superficie limpia, espolvorea un poco de harina y con ayuda de un rodillo extiende la masa. Coloca la pizza en el horno y ponle un poco de aceite en spray. Cocina a una temperatura de 250 °C durante un tiempo aproximado de 30 minutos o hasta que esté crujiente.
Retira la base del horno e incorpora la salsa de tomate junto con el queso y regresa la pizza al horno para que el queso se gratine.
Dale el toque final con los toppings de tu preferencia. Puedes usar rúgula, maíz, anchoas, tocineta, prosciutto, aceite de trufas o pimentón. Hay múltiples opciones para agregar, usa lo que tengas en casa y crea sabores deliciosos.
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