El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, confirmó que dio positivo para COVID-19 luego de que en las últimas horas se realizara una prueba ante las sospechas de algunos síntomas relacionados al coronavirus.
“Comenzó el domingo con una breve indisposición pero me siento perfectamente bien… Confieso que creí haberlo contraído hace unos meses atrás, pero no esperaba que esto hubiera ocurrido conmigo”, indicó Bolsonaro.
El mandatario brasileño ha desafiado y restado importancia al coronavirus, al que llegó a calificar de “gripecita”; caminando por las calles en plena cuarentena y realizando actos públicos sin la máscara de protección.
Precisamente, el mandatario estuvo reunido el fin de semana con el embajador de Estados Unidos, Todd Chapman, y otras personas para celebrar el Día de la Independencia de ese país, en donde se les vio sin medidas de protección.
“Todos posaron abrazados para fotos, sin máscaras, y se mostraron alrededor de una mesa sin protección alguna; lo que ha llevado al embajador a someterse también a un test de coronavirus”, confirmó la agencia EFE.
La cadena CNN Brasil reveló que Bolsonaro le contó a uno de sus reporteros que está con algunos síntomas del coronavirus, entre ellos 38º de fiebre; y que se hizo una radiografía de los pulmones en el Hospital de las Fuerzas Armadas.
“Vine del hospital ahora, me hice una radiografía del pulmón y está limpio; ¿vale? Voy a hacer un examen del COVID-19 dentro de poco, pero está todo bien”, aseguró el líder ultraderechista.
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El presidente de Brasil ha sido uno de los mayores escépticos del coronavirus y ha rechazado desde el inicio de la pandemia la implementación de confinamientos y el uso de la mascarilla de protección.
El presidente Bolsonaro ya se sometió a tres pruebas para detectar el coronavirus. Además, en mayo fue obligado por la Corte Suprema a entregar los resultados, que dieron negativo.
Precisamente, el manejo de la pandemia en Brasil ha provocado que sea el segundo país, después de EE.UU; más afectado en el mundo al registrar 1.6 millones de contagios y 65.487 muertes por el coronavirus.
Bolsonaro ha considerado como un “crimen” la imposición de cuarentenas porque “son una ruina económica para el país”. Asimismo, ha restado importancia a las recomendaciones sanitarias desde el inicio de la crisis sanitaria en el país; lo cual ha provocado la renuncia de varios funcionarios.
En muchas ocasiones el presidente se ha presentado en público sin tener mascarilla, estrechando la mano de simpatizantes y mezclándose con multitudes.
Además, ha criticado duramente las restricciones ordenadas por gobernantes locales a las actividades de la población; al asegurar que el impacto económico de los confinamientos generará más penurias que el COVID-19 .
Durante la emergencia y con las medidas de distanciamiento vigentes; el presidente se ha paseado en multitud de ocasiones por algunos barrios de Brasilia para conversar con los vecinos, muchas veces sin mascarilla de protección frente al coronavirus.
También ha participado en varias protestas a favor de su Gobierno y en las que se pedía el “cierre” del Congreso y el Parlamento mediante una “intervención militar” que le mantuviera a él en el poder y que provocaron aglomeraciones.
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