La WWE comienza a mostrar recortes presupuestarios en medio de la pandemia de coronavirus. La mayor empresa de lucha libre del mundo realizó una ola de despidos esta semana. Todo ocurrió después de Wrestlemania, el evento más grande del planeta de este deporte de entretenimiento.
De acuerdo con reportes de medios de comunicación de Estados Unidos, la World Wrestling Entertainment (WWE), presidida por Vincent K. McMahon, tomó la decisión a pesar de que la empresa recibió la autorización para seguir con sus eventos en directo por televisión, pues el gobernador de Florida, Ron DeSantis, consideró a la WWE como una empresa esencial en esta crisis por el coronavirus.
Los reportes indican que al menos 20 luchadores fueron despedidos por la WWE. En la lista están incluidos los latinoamericanos Primo Colón, Épico y No Way José. También fueron cesanteados los excampeones Rusev y Kurt Angle.
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Los deportes profesionales fueron incluidos en la lista de negocios que tienen permiso de permanecer abiertos en un memo publicado el 9 de abril; el comunicado incluye a “empleados de deportes profesionales, producción de medios con alcance nacional… sólo si la sede se mantiene cerrada al público general”.
El miércoles la WWE anunció que había realizado algunos cambios para recortar gastos y mejorar el flujo de efectivo. Esos ajustes se basaron en reducir los salarios de ejecutivos y miembros de la mesa directiva, disminuir los costos de operación, rebajar las erogaciones en talento, personal y consultores externos; también se decidió postergar gastos de la edificación de la nueva sede de la empresa en los siguientes seis meses.
A pesar de los estragos que ha hecho el coronavirus en Estados Unidos, la WWE se ha mantenido operando a puertas cerradas y con shows semanales (RAW y SmackDown) grabados. Entre los luchadores botados está la pareja conformada por Karl Anderson y Luke Gallows, quienes formaron parte de la cartelera de Wrestlemania.
Reportes de medios especializados, como Pro Wrestling Sheet y Fightful, señalaron que también fue despedido el comentarista en español Jerry Soto, quien confirmó la decisión de la WWE a través de sus redes sociales. El locutor tenía nueve años trabajando en la empresa.
