Foto: Nasa
La Nasa reveló que el Satélite de Estudio de Exoplanetas en Transito (TESS) ha descubierto tres nuevos planetas que orbitan alrededor de una estrella cercana que podrían ser el “eslabón perdido” para comprender la formación planetaria, ya que reúnen unas características que no se han conocido hasta ahora.
La estrella fue denominada como TESS Object of Interest (TOI) 270 y es aproximadamente un 40 % más pequeña que el Sol, tanto en tamaño como en masa. Además, el sistema planetario se encuentra a unos 73 años luz de distancia en la constelación sur de Pictor.
El investigador Maximilian Günther, del Instituto de Astrofísica e Investigación Espacial de Instituto de Tecnología de Massachusetts (MIT) destacó que esta estrella es silenciosa y está cercana a nuestro sistema planetario.
“TOI 270 es muy cercana a nosotros, y por lo tanto mucho más brillante que las estrellas anfitrionas de sistemas comparables. Con observaciones de seguimiento podremos determinar la composición de estos mundos, establecer si hay atmósferas presentes y qué gases contienen”, indicó Günther.
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El planeta más cercado a la estrella es TOI-270-B, el cual sería un cuerpo rocoso un 25% más grande que la Tierra y que realiza la órbita a la estrella cada 3.4 días. Los científicos creen que este exoplaneta puede tener una masa alrededor de 1.9 veces mayor que la de la Tierra.
“Debido a su proximidad a la estrella, el planeta b es un mundo caliente. La temperatura es basada solo en la energía que recibe de la estrella y es de alrededor de 254 grados Celsius”, explicó la NASA.
Por su parte, los otros dos planetas, TOI-270-C y TOI-270-C son respectivamente, 2.4 y 2.1 veces más grandes que la Tierra y orbitan la estrella cada 5.7 y 11.4 días.
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De acuerdo con los científicos, estos planetas pueden ser similares a Neptuno en nuestro sistema solar, ya que tienen composiciones dominadas por gases en lugar de rocas, y probablemente pesen alrededor de 7 y 5 veces la masa de la Tierra.
“Los planetas C y D podrían describirse mejor como minineptunes, un tipo de planeta que no se ve en nuestro propio sistema solar. Los investigadores esperan que una mayor exploración de TOI 270 pueda ayudar a explicar cómo se formaron estos planetas junto con un mundo casi del tamaño de la Tierra” resaltó la NASA.
El equipo del Instituto de Tecnología de Massachusetts (MIT) están interesados en estudiar a más profundidad al planeta más externo, TOI-270-D, ya que se estima que su temperatura podría ser de unos 66 grados Celsius, lo que lo convierte en el mundo más templado del sistema planetario.
“Si el planeta ‘D’ tiene un núcleo rocoso cubierto por una atmósfera espesa, su superficie sería demasiado cálida para la presencia de agua líquida, considerada un requisito clave para un mundo potencialmente habitable. Pero los estudios de seguimiento pueden descubrir planetas donde las temperaturas más frías podrían permitir que el agua líquida se acumule en sus superficies”, indicó la NASA.
En ese sentido, los investigadores destacaron que seguirán adelantando más estudios que puedan revelar más planetas adicionales a los que se han descubierto con el objetivo de entender cuál es su origen y composición.
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