La Fiscalía de Río de Janeiro (Brasil) aseguró que uno de los testigos mintió al vincular el nombre del presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, en su declaración sobre las investigaciones por el asesinato de la activista y concejal izquierdista, Marielle Franco.
La fiscal Simone Sibilio, una de las responsables de la investigación, explicó que la verificación del testimonio permitió concluir que la declaración era falsa, y agregó que el testigo podrá ser procesado por falso testimonio y obstrucción a la Justicia.
En ese sentido, la fiscal indicó que el actual mandatario no es investigado en este caso y que se convirtió en una víctima de una acusación calumniosa.
La vinculación del presidente brasileño surgió luego de que el canal de televisión Globo divulgara el testimonio que un portero del condominio, en el que Bolsonaro tiene su residencia particular, dio ante los investigadores en donde aseguró que los supuestos asesinos de la concejal estuvieron antes del crimen en ese conjunto residencial.
El portero, según Globo, relató que el expolicía Élcio Queiroz, acusado de conducir el automóvil desde el que se realizó el brutal crimen, se presentó en la urbanización el 14 de marzo de 2018, día en que Franco fue asesinada.
De acuerdo con Globo, Queiroz aseguró en el testimonio que se dirigía a la casa de Bolsonaro, desde la que se habría autorizado su ingreso al condominio.
Sin embargo, el expolicía en realidad fue hacia la residencia de Ronnie Lessa, otro expolicía que vive en la misma urbanización y que está acusado de haber disparado contra la concejal.
El medio de comunicación brasileño también había revelado que el portero indicó, en su declaración, que la autorización para la entrada al condominio la había dado por el intercomunicador “el señor Jair”, haciendo referencia al actual mandatario.
Sin embargo, Bolsonaro no estaba en Río de Janeiro ese día y se encontraba en Brasilia, en su condición de diputado, tal como quedó registrado en los documentos oficiales del Congreso, que tanto Globo como el propio mandatario han mostrado.
Las evidencias del falso testimonio
La fiscal del caso explicó que los investigadores revisaron el libro de registro de entrada de la urbanización y las grabaciones del intercomunicador, evidenciando que la entrada de Queiroz fue autorizada por Lessa y no por alguien en el interior de la vivienda de Bolsonaro.
“(El portero) mintió. Puede ser por varios motivos. Y esos motivos serán profundizados. El hecho es que las pruebas comprueban que quien autorizó la entrada fue Ronnie Lessa”, aseguró la fiscal, resaltando que las personas que den falso testimonio pueden ser procesadas.
La divulgación del testimonio del portero generó una fuerte reacción de Bolsonaro, quien publicó un video de 23 minutos en sus redes sociales en el que tildó de “canalla” al canal de televisión y se declaró víctima de una conspiración política.
Bolsonaro también acusó al gobernador de Río de Janeiro, Wilson Witzel, un antiguo aliado, de haberle entregado a Globo información sobre un caso que está bajo secreto de sumario, un hecho que el político desmintió.
E CONHECEREIS A VERDADE E A VERDADE VOS LIBERTARÁ! JOÃO 8:32 pic.twitter.com/qSG34ajhAr
— Jair M. Bolsonaro (@jairbolsonaro) October 30, 2019
Tras la declaración de la Fiscalía, Bolsonaro volvió a publicar en sus redes sociales el versículo de la Biblia de Juan 8:32: “Conoceréis la verdad y la verdad os hará libres”.
Ante las contradicciones del testimonio, el Ministerio de Justicia le pidió a la Fiscalía que investigue al testigo por los delitos de obstrucción a la justicia y acusación calumniosa.
El ministro de Justicia, Sergio Moro, recordó que no es la primera vez que surge un falso testigo en la investigación sobre el asesinato de Marielle Franco, en un intento por desviar la atención de los investigadores.
El asesinato de Franco, ocurrido en marzo de 2018, generó una gran conmoción en Brasil debido a que la concejal, negra, homosexual y procedente de una favela, se había caracterizado por ser defensora de los derechos humanos y por sus denuncias contra la violencia policial en Río de Janeiro.
