Té frío de durazno o albaricoque / Créditos: Instagram: thefitbowl - Pixabay
De todas las bebidas frescas la receta del té frío de durazno o albaricoque resalta por tener un sabor dulce natural. Es decir, despreocúpate que al prepararla no necesitas agregarle kilos de azúcar a tu té helado.
Este té frío o helado es original y se diferencia de muchos porque contiene té negro y un toque mínimo de vainilla. Además, el protagonismo del durazno es increíble… ¡No te pierdas la preparación al final del artículo!
Gracias a la técnico en nutrición Celia García por tan refrescante opción para pasar el rato.
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Usa el tiempo de tu agenda a tu favor y anímate a realizar el té helado o caliente con frutas. Su preparación no te ocupará más de 15 minutos; es sana y perfecta para sustituir una bebida adictiva como el refresco.
Por otro lado, si tienes mucho afán o las horas contadas y necesitas el té frío al momento, añade a la jarra cubos de hielo y lleva al congelador.
En caso de que estés en tu día libre, te sugerimos hacer el té como de costumbre y cortar las rodajas de la fruta de tu preferencia. El paso final consiste en remover esos ingredientes con azúcar o miel y enfriarlo por un par de horas.
Son diversas las frutas recomendadas para té frío, entre ellas figuran las rodajas de piña, de manzana, albaricoque, limón, naranja, fresas, entre otras.
Cocina la infusión del té que usarás y después que se enfríe vierte el líquido en una jarra junto con la cantidad de agua que necesites. Para finalizar, decora con trozos frutales.
Una de las recetas de té helado más populares y aceptadas por los fanáticos es el té verde con limón, que por cierto, se toma a temperatura ambiente o frío.
Lo ideal es tomarlo después de 6 horas de su preparación con el fin de disfrutar todas las propiedades de la fruta y la infusión de té. Sin embargo, un té helado también puede esperar en la nevera hasta el día siguiente.
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Corta los duraznos o melocotones en 8 partes y colócalos en una olla junto con la vaina de vainilla y sus semillas.
Vierte ½ taza de agua y deja que se caliente a fuego medio.
Cuando hierva, baja la llama y espera que se cuezan los duraznos o albaricoques durante 30 minutos.
Mientras tanto, calienta la otra taza de agua para hacer el té negro.
Cuando tengas los duraznos listos, machácalos con un tenedor y pásalos por un colador haciendo bastante presión para sacar todo el jugo.
Mezcla el jugo de durazno con el té y cuando haya templado, sirve y lleva al refrigerador.
Al momento de tomar té frío o té helado solo debes agregar cubos de hielo al vaso, un chorrito de agua y rodajas de melocotón extras.
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