Puede que no siempre resulten visiblemente apetitosos, pero los alimentos con cáscara como frutas y verduras, son una fuente de nutrientes que podemos aprovechar al máximo para mejorar nuestra salud. Incluso mucho de esto que solemos desperdiciar es capaz de prevenir enfermedades como la obesidad, diabetes y el cáncer, así que olvídate de botar la piel de los alimentos y comienza a disfrutar de sus propiedades.
La papa es un alimento con cáscara poco aprovechado
La nutricionista-diestista y directora técnica de la consultora Aizea, Marian Alonso-Cortes, comentó para El País, que 200 gramos aproximados de papa, con piel, puede cubrir hasta el 75% del hierro que necesita nuestro cuerpo a diario. De igual manera el 24% de vitamina B6, para formar glóbulos rojos, 20 miligramos de ácido alfa-linolénico, esencial de la familia omega-3.
De igual manera, la cáscara de la papa es rica en fibra, lo que contribuye a enriquecer la microbiota intestinal, y también contiene potasio, un mineral que regula la tensión arterial. Por si fuera poco tiene vitamina C, carotenoides, flavonoides y ácido cafeico, que combaten el daño de los radicales libres. Sin embargo, gran parte se pierde con la cocción.
Pero, la papa puede contener una asistencia tóxica que funciona como sistema de defensa, llamado solanina, la cual es verdosa y debe eliminarse, ya que la sola cocción no es capaz de desnaturalizarla ni evitar sus efectos.
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Otros alimentos que se pueden comer con piel: la berenjena
Existe una gran variedad de berenjenas pero la más común es la de piel morada oscura. Si bien es cierto que lo más jugoso se encuentra en la pulpa, la piel de la berenjena tiene compuestos bioactivos llamados antocianinas, que pertenece a los flavonoides. Funcionan como un poderoso antioxidante que ayuda a fortalecer el sistema cardiovascular.
Además, la fibra que tienen los alimentos con cáscara como la berenjena, ayudan a depurar el organismo y bajar los niveles de azúcar en la sangre, siendo ideal para los diabéticos. De igual forma, contiene un fitonutriente llamado nasunin, que combate los daños ocasionados por el envejecimiento de la piel.
Aprovecha la fibra del pepino
El pepino es otro de los alimentos ideales a comer con cáscara ya que aporta una gran cantidad de fibra insoluble, la cual no se encuentra en el interior. Gracias a este tipo de fibra se limpia al tracto digestivo y evita el estreñimiento. La parte blanda, por su parte, contiene fibra soluble, convirtiéndolo en un alimento bastante beneficioso.
La piel del pepino también aporta vitamina K, ideal para el buen mantenimiento de los huesos y el impulso del crecimiento celular. Por otra parte encontramos vitamina A, B1, B2, C que ayudan a regenerar el aspecto de la piel.
Arándanos siempre con piel
Las frutas con cáscara como los arándanos contienen fibra, minerales y antocianinas, ideales para mejorar la salud cerebral. Por lo tanto estos alimentos con cáscara mejoran la función cognitiva y disminuyen posibles trastornos de memoria.
Zanahoria sin pelar en tus comidas
Otro de los alimentos que se puede comer con piel es la zanahoria, su pigmento natural se debe a la presencia de carotenos, betacarotenos y pro-vitamina A. Es importante agregar pequeñas cantidades de zanahoria rallada y sin pelar a nuestras comidas para aprovechar sus propiedades.
En el caso de tener mucha tierra o hayan sido tratadas con pesticidas, lo mejor es desechar la piel.
El tomate tiene propiedades anticancerígenas
El tomate es mucho más nutritivo cuando se consume con piel, ya que contiene licopeno, un fitoquímico que funciona como el mejor de los antioxidantes, acompañado de vitamina C. Incluso un estudio consiguió que solamente un plato de pasta que incluya salsa de tomate con 6% de piel, presenta hasta un 58% más de licopeno y un 99% de betacaroteno, que aquellas que desechan la cáscara.
Por si fuera poco, los alimentos con cáscara como el tomate, tienen otros poderos antioxidantes, como la quercetina, un flavonoide con propiedades antiinflamatorias y anticancerígenas que podemos aprovechar.
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