El jugo de naranja es una bebida refrescante, cargada de vitamina C, y deliciosa para quienes aman tomar un batido cítrico. Una de sus tantas bondades es que rinde para muchas personas, una vez que lo agregas al extractor de jugo y lo fusionas con agua.

Especialmente el concentrado del jugo de naranja tiene propiedades antioxidantes. Este te da la oportunidad de combinarlo con verduras, por ejemplo, zanahoria o limón. Para muestra un botón, mira de cerca la receta de Ariane si deseas prepararlo con limón o jengibre.

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Preparación del jugo de naranja

Realizar tu zumo o jugo de naranja no te tomará más de 15 minutos, pues solo debes lavar las naranjas y el limón antes de cortar.

Después, una vez tengas las frutas desinfectadas, usa el extractor de jugo para obtener el jugo de 6 naranjas y el limón. Posteriormente, pica el jengibre en rodajas pequeñas y agrega el resto de los ingredientes a la licuadora.

¿Cómo preparar jugo o zumo con el extractor de jugos?

El vaso batidor no es el ideal para preparar zumo de naranja, porque está compuesto de un rallador que gira rápidamente para separar el líquido de la fruta. El resultado es que el zumo queda con poca cantidad de fibra.

Sin embargo, con el extractor de jugos, la calidad del zumo es mucho mejor, empezando por la textura y sabor acabado de preparar, debido a que se mantienen en su punto óptimo.

Otras combinaciones que quedan bien con jugo de naranja

Si tienes temor en combinar el zumo de naranja con otras frutas, acá te detallamos ideas adicionales que bien pueden ayudarte a sentirte mejor, con solo un sorbo.

Remolacha, naranja y zanahoria

Es natural y antioxidante. También, es un licuado potente lleno de vitaminas que, a su vez, te permite agregar la zanahoria para añadirle un sabor refrescante y saludable.

Piña, avena y naranja

Lo mejor que puedes hacer es incorporarlos a tu rutina semanal y beberlo cuando necesites una dosis de energía a media mañana o en la tarde.

¿En qué horario debo tomarlo?

Cualquier hora es buena para tomar zumo de naranja, pero si te cuesta estar activo en la mañana, es una buena idea beberlo durante el desayuno. En caso de que estés comenzando un plan de alimentación un poco más estricto, debes saber que en la merienda cae bien un batido.

Si eres fanático de consumir zumo o jugo de frutas en la noche, es importante que antes de hacerlo consultes con tu médico de confianza. Por lo general, tomar bebidas azucaradas al final del día puede que no sea una buena idea para tus valores.

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